miércoles, 7 de noviembre de 2007

Roban 40 mil tarjetas de Orange Dominicana; detienen a cuatro implicados


Lissette Rojas

SANTO DOMINGO, DN (República Dominicana).- La Policía informó hoy jueves que detuvo a cuatro personas implicadas en el robo de 40,000 tarjetas de llamadas de la compañía Orange Dominicana –con un valor equivalente a cuatro millones de pesos-, que fueron sustraídas de un furgón en una empresa de Haina.

Las tarjetas de denominación de RD$ 100 pesos fueron hurtadas el pasado nueve de septiembre y los detenidos son Santiago Marte Linares (Lucas), de 33 años de edad; Frank Vásquez Pineda (Papo), de 38; Inocencio Encarnación Adames (El Sereno), de 44 años, y un menor de 16 años.

Las unidades robadas se encontraban en el furgón 4998507, que estaba estacionado en un solar por la Compañía. Dominican Internacional Forwarding (DIF), ubicado en la calle principal del sector Quita Sueño de Haina.

Los ladrones violentaron los remaches de la palanca que sostiene el tubo de la puerta derecha del referido furgón.

Los investigadores determinaron que los detenidos supuestamente planearon el robo, utilizando para la acción una mandarria roja, dos cinceles y una válvula para vehiculo. Estas piezas les fueron ocupadas a Martes Linares junto a 384 tarjetas.

Mientras, a Vásquez Pineda se le ocupó 24,400 tarjetas y el carro Nissan Sentra, color rojo, placa No. A044274, utilizado para transportar los objetos sustraídos.

Al menor detenido, cuyo nombre se hace reservas, se le ocupó 184 tarjetas de llamadas.

Los detenidos, al ser cuestionados por los oficiales investigadores en compañía del Ministerio Público, manifestaron que cometieron el hecho en combinación con el sereno Encarnación Adames, que era la persona que tenía el furgón bajo su responsabilidad. Alegadamente también actuaron en complicidad Pérez Vélez, Radhamés, Ramón Jiménez, Isaac, Erika y "Preso", estos últimos prófugos.

Los detenidos serán puestos a disposición de la justicia en las próximas horas, mientras que la Policía Nacional hace un llamado a los prófugos para que se entreguen a las autoridades para responder por su participación en este hecho.

La semana pasada en este medio se publicó que "pese a que reconoce que cientos de tarjetas de llamadas que se venden en las calles están inhabilitadas porque sus códigos fueron robados, la compañía de telecomunicaciones Orange Dominicana aún no asume la responsabilidad frente a sus clientes".

Se alertaba de que el lote de tarjetas de recarga de diversas denominaciones fue substraído por desconocidos y vendido en las calles por proveedores ambulantes que por lo general están en las intersecciones, dijo un representante que respondió a la décima llamada de un usuario.

Al descubrir el hurto, Orange Dominicana inhabilitó todas las tarjetas registradas como parte del paquete robado. De ese modo, el costo de la estafa recayó sobre los clientes que las compraron en las esquinas y que trataron, sin lograrlo, introducir el número de catorce dígitos para recargar.

Varios usuarios reportaron que, al principio, los técnicos de la empresa de telecomunicaciones se mostraron interesados por saber dónde ellos compraron la tarjeta y hasta les pidieron una descripción del vendedor o vendedora.

No obstante, una vez que habían dado esa información se mantuvieron hasta un mes llamando al *555 del "Mundo Orange" para obtener una respuesta, pero lo único que les dijeron fue que el problema sería resuelto en 24 horas, promesa que nunca cumplieron.

El Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (Indotel), a través de su centro de asistencia al usuario, informa que el plazo que tienen las compañías telefónicas para resolver los inconvenientes con sus clientes es de 20 días calendario (incluyendo sábados y domingos).

La telefónica informó que "están trabajando masivamente con todas esas reclamaciones para poder resolver el caso", le dijo un asistente de Indotel a una clienta que interpuso un reclamo ante ese organismo y a la que se le dieron diez días laborables para gestionarle el reembolso de su dinero.